Participa en la encuesta que malasmadres ha lanzado con el fin de concienciar y aportar más hacia una auténtica conciliación y corresponsabilidad.

“Cariño, tienes que rellenar esta encuesta; las malasmadres buscan hombres…” (Modo chiste on: cariño, ya lo sé, buscan hombres como el tuyo pero las llevan claras…). Acto seguido me enseñó esa publicación en Instagram tan bien pensada que combina un titular súper llamativo jugando con los tamaños de la letra para generar un plus de atención: “Se buscan hombres …”. ¡Bien por las malas madres! Chapeau…

Ea, aquí tienes tu dosis de Marketing Online: juega con el tamaño de la letra y con la tendencia de escaneo para llamar la atención.

Al aplauso por el acierto del diseño le siguió la decepción del reflejo de nuestra sociedad: “sólo un 5% de hombres completó la encuesta”. ¿Coooomo? ¿Aún estamos con esas? No puedo creérmelo.

La pregunta es: ¿No nos ha llegado la encuesta? ¿No nos sentimos identificados con el rollo “malamadre” (imposible, son auténticas y es de los mejores sentidos del humor que he conocido)? O…. (por favor que no sea esta) ¿Es una realidad que los hombres no estamos comprometidos con la conciliación y la corresponsabilidad?

[piopialo vcboxed=»1″]Hay que ser muy hombre para completar esta encuesta. #somosequipo ¡Hazlo Ahora![/piopialo]

Esto es un rollo importante: hombres emprendedores, trabajadores, bloggers, ratones incluso que me leéis … ¡rellenad esta encuesta por favor!

5 Consejos de productividad corresponsable para trabajadores domésticos

Me iba a quedar ahí, pero he visto que sólo eran 200 palabras y paso de enfadar a Google ahora que me está cogiendo aprecio y me manda más de 10 visitas al día. Que majo es…

Así que, por alargar y completar el post, aprovechando que yo estoy súper concienciado con esto de la conciliación y corresponsabilidad, que no veas que gusto haber convencido a mi jefe que me deje trabajar desde casa, he decidido compartir contigo 5 consejitos de productividad para “homeworkers”. Qué bonita palabra.

• 5 minutos de estirar las piernas cada 50 de trabajo. En casi todos los libros de productividad que he leído coinciden en que debemos descansar un poco la mente cada 50 minutos. 5 minutos de separación de la pantalla hacen un mundo. En serio, pruébalo. ¿Qué hacer en esos 5 minutos? Pues yo empecé por levantarme y hacer estiramientos, pero como tardaba más tiempo en ponerme las calcetas, mallas, muñequeras y cinta de la cabeza (del pelo dicen los normales) al final decidí aprovechar esos 5 minutos para cosas como colocar recoger enredos, enchufar lavadora, recoger lavavajillas… No sé, cosas de esas que pensaba que se hacían solas. Vale, no todos los días, pero voy mejorando.
• Usa auriculares para llamar por teléfono. ¿Cuántas llamadas haces al día? Yo hago y recibo un montón. Clientes, compañeros, mi papi que le ha llegado una carta de Ono, el médico (de ese no)… Lo curioso es que la mayoría de esas llamadas no exigen un 100% de concentración (ni siquiera a nosotros, que somos más de “focus”) y me di cuenta que a veces terminaba haciendo garabatos en un papel durante la llamada … Así que probé una barbaridad: ¿se puede cocinar mientras hablas por teléfono? Si, sobre todo si es un Yakisoba. ¿Se pueden recoger los gayumbos del baño mientras llamas? Si. ¿Se puede hacer pis mientras llamas? No, el cliente se da cuenta. El caso es que, con unos auriculares, puedes optimizar ese tiempo la mar de bien.
• Moldea tu horario. Durante un tiempo disfruté del placer de acabar la jornada laboral a las 13. ¿Cómo? Pues me levantaba a las 6am y me ponía a trabajar como un campeón aprovechando que el mundo aún dormía y, sin interrupciones y con las pilas cargadas, mis tareas más importantes estaban terminadas a eso de las 10. Era flipante. La siesta era … ains. Ahora que Marina ha empezado la guarde, me levanto a las 7:45 y vamos preparando todo para dejarla en la guarde (una semana papi, una semana mami) a las 9. Esa es la hora en que empiezo a trabajar. La siesta se acabó, mis momentos de máxima concentración son de 15 a 17. El caso es que, de una forma u otra, es posible moldear tu horario a tu situación acutal para conseguir momentos de trabajo productivo y de disfrute familiar.
• Crea un ritual de desconexión. No todo es echarse flores. ¿Sabes la de hostias interiores que me he arreado al descubrirme pensando en cosas del curro mientras Marina (o mami, que también pasa) me está repitiendo por cuarta o quinta vez algo (a veces incluso: Vic, tu boca está a 35 cm de la cuchara, no la gires aún). Aprender a desconectar es clave y necesario. Conciliar no es estar de cuerpo presente y tener la atención en el trabajo el 100% del tiempo. No. Para eso se compran un osito de peluche y le ponen tu nombre. ¿Me sigues? Es necesario que crees un ritual de desconexión que te sirva para decirte “eh, se acabó, ya no estás trabajando”. En mi caso voy cambiando el ritual porque va perdiendo efectividad con el paso del tiempo. El de ahora es poner a toda leche “Good Lovin 2.0” de Sweet California y bailar un rato.. Es broma. Para de imaginártelo y ¡ni se te ocurra buscar la canción!.
• ¡Tira ya esos pantalones hombre! Esta no la iba a poner pero 5 consejos mola más que 4 así que … Soy hombre, me gustan esos pantalones de la indumentaria del equipo de baloncesto en el que jugué (12 minutos en toda la temporada.. metí 4 puntos) hace 10 años y me siento cómodo con ellos. Trabajo desde casa, ¿qué pasa por llevarlos puestos todo el día? ¿Qué pasa por llevarlos puestos todos los días? ¡Si estando en casa no se ensucian! Pues … ejem. Mantén un poquito de “encanto” hijico mío, que antes cuando salías al menos te ponías unos vaqueros encima…

[piopialo vcboxed=»1″]Yo en mi casa vivo, trabajo, limpio y concilio (a veces macarrones) #somosequipo[/piopialo]

Acabando el post …

¡Ya está! Una vez te pregunté qué pasaría si un servidor decidiese publicar un “offtopic” o incluir algunos posts no relacionados con el marketing online y me contestaste que no pasaría nada, que es a Víctor a quien buscas cuando accedes a este humilde blog. Pues aquí tienes al Vic, concienciado, preocupado y defensor de la conciliación y corresponsabilidad. Aquí estoy pidiéndote de nuevo, tanto si tienes pilila como si no, que completes la encuesta para ayudar a hacer un mundo mejor.

Y… bueno, pues como siempre… ¿Qué te ha parecido? ¿Tu concilias? ¿Cómo te organizas? ¿Algún truquito que contar? ¿Podrías explicarme de una vez por todas por qué separamos blanco de color pero las toallas rosas se pueden mezclar con el blanco o los calzoncillos blancos en lo de color? Aún estoy en ello… ¡Cuenta, cuenta!